Redes desplegadas en el mar

Dr. Michael LaitmanCartas de Rav Kook: Incluso a la persona más baja, cuando se le ofrece hacer la bondad con el mundo entero, lo cual incluye todo el infinito, se regocijará con fuerza para hacer el bien.

Toda la pereza y la debilidad son sólo una consecuencia de la falta de fe en la grandeza del bien que puede hacerse con el universo entero al participar en la Torá, las Mitzvot, en el trabajo y la pureza de nuestras medidas. Esto se representa mediante la comprensión de la unidad espiritual, que significa saber que la luz del alma de cada individuo está conectada con el alma general de toda la existencia.

Cada persona debe decir que el mundo fue creado para ella. Cuando la persona hace su trabajo, ella genera un cambio en todas las otras almas. Esto se debe a que todos pertenecemos y estamos incluidos en un mecanismo, y cuando la persona corrige su conexión con todo el mundo, ella le aporta de nuevo las partes de su alma y por lo tanto les ayuda a los demás a conectarse.

Es como red de pesca que fue arrojada al mar durante la ruptura. Como resultado de la ruptura, yo me queda sólo un punto en el corazón, y mis otras partes están dispersas en el agua y permanecen fuera de mí. Yo nací así; es un hecho. Ahora tengo que sacar la red, reunir mis partes perdidas y conectarlas de nuevo a mí.

Al trabajar con el público, yo por un lado conecto nuevamente mis partes a mí, y por el otro, les doy a todos y a cada uno la fuerza espiritual para empezar a trabajar con su propia red. Me parece que hablo con extraños, pero en realidad soy yo en diversas formas.

Cuando atraigo personas a esta idea, resulta que acerco las partes de mi alma. Toda la humanidad son partes de mi alma. Pero excepto esta, mi parte, cada una tiene su propia personalidad. Al atraer  mis partes, yo les transmito a ellas la fuerza espiritual por medio de la cual pueden trabajar con su propio círculo, con su propio mundo.

Resulta que cuando saco del agua esta red, yo despierto todas las partes de mi alma que estaban conectadas a esta red, y cada uno saca su propia red y aclara su contenido porque cada uno tiene su propio mundo. Por lo tanto, entendemos que el trabajo con el público nos permite conectar las partes de mi alma; la cantidad se convierte en calidad y así cada uno avanza hacia la implementación de la creación de las diez Sefirot de su propia alma.

(136313)
De la preparación para la lección diaria de Cabalá del 5/30/14

Material relacionado:
Una petición para la luz que retorna
El símbolo de la realidad actual: el signo de interrogación
Un largo camino hacia la conexión

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *