Respecto a las revoluciones y la creación

Dr. Michael LaitmanTodas las revoluciones de la humanidad exigieron igualdad, no por un nivel mínimo de vida, no para «vagabundos en el desierto», sino por condiciones normales para la gente. Para que los impuestos no estén a disposición de los pocos que «incautados» en el poder o, en la época actual, del Parlamento.

Actualmente y en general nuestra vida está distorsionada: los gobiernos recaudan dinero de sus ciudadanos y luego hacen lo que quieren sin preguntar nada. «Tú nos elegiste, ahora déjanos hacer lo que creamos que es correcto» Nadie se preocupa por las necesidades de la gente común. Las personas trabajan y pagan impuestos y el gobierno los recibe y gasta como lo considere oportuno.

Eso es lo que sucede en todo el mundo, en todas las formas de gobierno. De hecho, esto no es democracia ni liberalismo, sino una gran corrupción.

La pregunta es: ¿Cómo se puede corregir esta situación? Sólo a través de la unificación de las personas. Pero muchos tratan de usar a la gente, para tomar el control, estar por encima, hacerse del poder y distribuir fondos en sus «bolsillos».

Y esto no se detendrá. La corrupción alcanzará tales proporciones, que ni siquiera migas se dejarán para el pueblo. El mundo entero se enfrenta a este problema.

Aquí sólo un sistema general de educación podrá ayudar, a través del cual la gente entenderá lo que tienen que hacer y qué tipo de gobierno necesita. Así no van a ser mal dirigidas y no van a elegir otro gobierno corrupto.

Después de todo, van a ver y a saber que en su unión radica el poder divino de la creación, que permite, no sólo abandonar cosas innecesarias, sino también construir lo que se desea. Sólo entonces, a través de la educación de las personas, se puede crear algo nuevo.

Nada más va a ayudar. Hoy en día algunas personas instruidas hablan y discuten de política, de crédito, de impuestos y presupuesto; pero es una gran mentira, detrás se esconde una lucha por el poder, por el trabajo fácil. Y no habrá ningún beneficio para nadie, sólo para el «afortunado» que se apodera del puesto.

A lo largo de la historia humana, en los momentos de formación, el principal problema fue la falta de educación de las personas. Enseñar a la gente a leer, a escribir y algo de ciencia sin conexión ni unidad real no es verdadera educación.
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De la 3ª parte de la Lección Diaria de Cabalá 20/03/14, Escritos de Baal HaSulam

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