Cuando los deseos desaparecen

Pregunta: ¿Qué diferencia a la libertad en el mundo espiritual y el corporal?

Respuesta: La libertad en el mundo corporal es libertad de todas nuestras necesidades egoístas: comida, sexo, familia, conocimiento, poder y riqueza. Vemos que, cada vez más, el hombre desea liberarse de estas cosas.

Pregunta: ¿Es eso posible? ¿Puede una persona liberarse del deseo de tener relaciones sexuales, de comer?

Respuesta:  La comida, el sexo y la familia son tres tipos de deseos animales del cuerpo físico. Veo que hoy el hombre está tratando de liberarse de ellos. Los jóvenes no están particularmente interesados en los platos gourmet, están satisfechos con un hot-dog rápido en el camino y eso es todo.

El sexo es una noción relativa para ellos. Según las encuestas, muchas personas ni siquiera quieren agobiarse con sí mismas. Hace tiempo que la familia deja de ser una necesidad, algo que la sociedad necesita, y la sociedad incluso alienta esta actitud.

Los deseos animales son seguidos por los deseos humanos: riqueza, poder, fama y conocimiento. Los jóvenes también están perdiendo el deseo por estas cosas, en términos relativos. La riqueza viene y va. Y no solo la riqueza, todo va a algún lado. Ahora estamos en un período de transición que pronto terminará y se nos presentará un sistema de valores completamente diferente.

La fama y el poder siempre van juntos, pero hace mucho que dejaron de ser lo mismo que una vez fueron con los grandes gobernantes. En cuanto al conocimiento, la ciencia no siente de ninguna manera que sea la cumbre de los ideales de la humanidad, de logro.

Pregunta: Entonces, ¿qué queda?

Respuesta: Nada. Los valores están siendo reevaluados de tal manera que nada del pasado permanece. La siguiente etapa es una búsqueda: ¿hay algo de valor en nuestras vidas?

Nuestro desarrollo se desarrolla a un ritmo y en una dirección tales que todos los deseos comienzan a parecernos vacíos.

Desde nuestro nuevo nivel de desarrollo, vemos que no son importantes, que no nos satisfacen, no hay cualidades especiales en ellos.

Observación: Mucha gente piensa de esta manera: «Lo quiero, simplemente no puedo obtenerlo…»

Respuesta: Una persona puede obtener cualquier cosa. Pero los jóvenes de hoy no quieren perder su tiempo en alcanzarlo; considerando que, en el pasado, ¡los jóvenes sacrificaban toda su vida por ello! Décadas de trabajo duro, estudios, empleo, ahorros y todo lo demás, ¿para qué?! Ahora entienden que no hay nada que «valga la pena».

¿Por qué debería estudiar, trabajar, casarme, tener hijos y crear una familia?  Para pasarlo a mis hijos, ¿vivirán de la misma manera? ¿Y entonces que? Ninguna de estas acciones tienen sentido. Hoy las personas se están convenciendo de eso.

Pregunta: Entonces, ¿cuál es la elección, cómo sé que estoy en el camino correcto?

Respuesta: La Cabalá dice que una persona tiene que elevarse por encima de este tipo de deseos, los animados egoístas (comida, sexo y familia), y los deseos humanos, que existen en nosotros además de nuestro grado animado (riqueza, poder, fama y conocimiento). ¿Para qué es esto? Cuando no quedan deseos y una persona se convence gradualmente de que esto no es lo que le importa, se enfrenta a la pregunta: ¿Cuál es, entonces, el significado de la vida? No quiero ser forzado a estar en estos deseos. Entonces, ¿por qué debería existir? Es entonces cuando se enfrenta a la pregunta sobre la siguiente forma de deseo: ¿hay algo más alto que esto? ¿Hay algún ideal que haga que el vivir valga la pena?
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De la lección de Cabalá en ruso 2/jul/17

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