El programa de Trump a la luz del Gobierno Superior, parte 2

Dr. Michael LaitmanNo tiene sentido desperdiciar energía en intentar arreglar la economía de Estados Unidos porque es imposible traer de regreso fábricas que fueron trasladadas a China hace treinta años. No hay necesidad de ellas ni para USA ni para el mundo. Actualmente, China ya ha trasladado esas fábricas a la India.

Los estadounidenses deben comenzar a producir un nuevo tipo de mercancía, los únicos productos especiales que son requeridos en todo el mundo, es decir producir personas. Esta producción es debido a que las personas desempleadas obtendrán trabajos: aprenderán a unirse.

Tras unos cuantos meses de esos estudios, cada uno recibirá fuertes impresiones nuevas con respecto a qué es un “humano” correcto y una sociedad humana correcta. Necesitamos continuar de esta manera. Después de todo, la persona no tiene nada más qué hacer en la vida que generar una fuerza superior, la fuerza más poderosa en el mundo que puede hacer milagros en toda la naturaleza. Todo depende sólo de la conexión entre la gente.

Por lo tanto, no debemos pensar que ésta producción no produce bienes. Generaremos un producto y seremos capaces de medir la fuerza producida por nosotros, el poder de la conexión que recibimos y el éxito que logramos a través de ello incrementará día con día.

Podemos evaluarlos de acuerdo al nivel de deseo, conexión, restricción y Masaj (pantalla). Esas características son mucho más precisas que nuestra economía actual con sus métodos para evaluar el trabajo: esfuerzo invertido y resultados recibidos.

No hay duda de que así lograremos un desarrollo ilimitado. Sólo necesitamos explicarlo a la gente y, antes que nada, a líderes como Trump.

No hay alternativa porque se estima que alrededor de setenta a ochenta por ciento de la población trabajadora estará sin trabajo en unos años. No importa cuánto nos resistamos a la introducción de  robótica y  sistemas automatizados. El concepto de una persona trabajando para asegurar su existencia material ya ha caducado. Marx escribió acerca de ello hace casi doscientos años.

La tecnología ha llegado a un nivel de desarrollo donde diez  personas son capaces de obtener cultivos para diez millones y otros producirán la fuerza especial que estabiliza toda la sociedad y la lleva hacia una forma óptima donde las diez personas que ahora pueden servir a diez millones, podrán servir a diez mil millones.

Recibimos una bendición de arriba, para todo lo que hacemos. Además estamos comenzando a entender hasta qué grado lo necesitamos. Nos damos cuenta que debemos limitarnos a un consumo razonable para no envenenar el medio ambiente. Estamos aprendiendo a unir a la sociedad humana y, mediante esto, ahorrar energía y dinero y eliminar sufrimiento, guerra y terrorismo.

No necesitamos ir con los terroristas y darles conferencias. Al atraer la Luz común, la fuerza común, tranquilizamos todos los disturbios. No es necesario tratar en particular con Pakistán ni con ISIS. Si nos ocupamos de la corrección común, todos esos puntos de peligro, de pronto se tranquilizarán. Los terroristas, de pronto, sentirán que deben tratar a la gente de forma más amable.
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De Kabtv “Conversación acerca del programa de Trump a la luz del Gobierno Superior” 25/nov/16

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