El propósito de crear al hombre es que se transforme a sí mismo, de ser opuesto a ser similar al Creador, es decir hacerlo adquirir la propiedad de actuar únicamente por el bien de otros en lugar de actuar únicamente por el beneficio propio. Esta transformación de la naturaleza puede ser alcanzada por medio del estudio del Libro del Zohar, por que según el grado de la necesidad de la persona, una fuerza que reforma la naturaleza del hombre se revela durante la lectura.
Aunque la persona no tenga el más mínimo deseo de cambiar y piense únicamente acerca de su propio beneficio, sin embargo, al estar bajo la influencia del entorno, el gradualmente reconoce que la habilidad de otorgar es el recurso más vital en su vida. De este modo, el estudia con el grupo para poder aumentar su aspiración por ser reformado.
Si los amigos se presentan a sí mismos como un todo, su estudio provocara un impacto de la fuerza oculta, la cual se manifiesta como amor mutuo y otorgamiento. Y a pesar del hecho de que nadie toma su transformación seriamente, eventualmente bajo la influencia del entorno y de la fuerza escondida en el estudio colectivo del Zohar, todos experimentan cambios auténticos, todos adquieren la naturaleza del Creador y sienten el mundo superior.
(36281 – De la 2º parte de la lección diaria de Cabalá del 2/24/2011, «Introducción del Libro del Zohar»)
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