No sólo una pandemia

El mundo está en un estado tan difícil, que será forzado a avanzar hacia la conexión, lo quiera o no. Estamos siendo empujados desde arriba y si no queremos conectarnos, de todas formas, la conexión empezará a implementarse. Sentiremos oposición a ella y tendremos grandes sufrimientos y problemas. 

Es similar a la actitud de los padres hacia los hijos. Si los hijos son amigables y obedientes, los padres les tratan amablemente. Si los hijos se comportan mal, los padres tienen que castigarlos para corregirlos y los hijos sienten que es malo. 

Nos encontramos ahora en una situación especial. Por primera vez en la historia, la sociedad humana está pasando por una transformación general. La pandemia del coronavirus es en escala incomparable, incluso con la Segunda Guerra Mundial; pues afectó a todo el mundo. Y además de la pandemia, llegarán otros golpes: cataclismos climáticos y otros eventos extremos, para obligarnos a unirnos más y juntos resistir los golpes de la naturaleza, es decir, del Creador. 

Esto no es sólo una pandemia, sino el comienzo de una nueva era que, de forma gradual, nos equilibrará para llevarnos al estado correcto y a la sensación de conexión y dependencia mutua. Ya podemos ver que todo ha cambiado en el último año: los turistas ya no viajan alrededor del mundo. Todos están refugiados en su propio lugar.

Por ahora, aún tenemos la esperanza de regresar a nuestra vida de antes, pero ya no será. No se necesitarán tantos aviones y barcos; mucho cambiará en el mundo. Los problemas ya no se irán hasta que establezcamos nuestra conexión. Si la conexión es correcta, nos llevará a la integración y a la unidad y no para beneficio propio. Así, el sistema funcionará. De otra forma, no. Así nos educará el gobierno superior.

El Creador detendrá todas nuestras actividades egoístas, hasta que gradualmente aprendamos, con el ejemplo del sistema general a escala global, la forma de trabajar adecuadamente con nuestro egoísmo. Ya no nos permitirá portarnos mal. 

Durante los últimos cien años, el Creador nos permitió construir sistemas globales, internacionales, alrededor del mundo, a nivel material: Internet, relaciones industriales, turismo y relaciones internacionales. Ahora, necesitamos aprender a trabajar correctamente con estos sistemas, para bien de nuestro prójimo y para beneficio del Creador. 

La forma de la conexión correcta es cuando todos intenten satisfacer al otro, como la unión del hombre y la mujer, el más y el menos. Por consiguiente, tengo que observar la carencia de otros, cómo puedo satisfacerla. Y ellos buscan mis carencias. 

Es opuesto a nuestro egoísmo, donde intentamos crear una alianza mutua, para ganar dinero del otro. Pero el desarrollo ha alcanzado tal límite, que este enfoque ya no funciona. La unión egoísta se acabó para obtener una ganancia, como antes. 

Por lo tanto, estos sistemas caerán y se detendrán, hasta que entendamos la forma en que deberían operar. Hasta ahora, nos hemos desarrollado de forma egoísta, pero ya es tiempo de corregir lo que hemos hecho. Todo esto sucederá en los próximos años.
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De la lección diaria de Cabalá del 26/jun/21

Material relacionado:
“Cómo cambiará el mundo después de la pandemia de COVID 19 ?” (Quora)
“¿Cómo afecta la pandemia al sistema educativo?» (Quora)
El Libro del Zohar – Capítulo “El Sexto Mandamiento”

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